martes, 27 de noviembre de 2007

27 de noviembre de mil ciento siete. Doce y cuarenta y cinco de la madrugada.

Intermedio.
Estaba estudiando para Estructuras, leyendo a Hegel. Me daba mucha fiaca empezar y me acorde de la idea de una epifanía, una revelación.
Al estilo del Rey Salomón: ‘si le pido al señor riquezas él me las dará, pero si le pido sabiduría, las riquezas vendrán con ella.’ O algo así… entonces tendría en mi cabeza todos los conocimientos que necesito para rendir bien o lo que sea… pero
Al mismo tiempo me vino a la cabeza el problema que tiene este tipo de revelaciones… el hecho de que dios te de una revelación… es casi una imposición a tu ser, es algo que no viviste no aprendiste y no es propio de tu esfuerzo, es una limosna divina, es una maldición ya que niega tu voluntad, es algo que no provino de tu vida. Así que dudo mucho que yo fuera capaz de apreciar esa epifanía… si es algo tan ajeno a mi vida que no se donde meterlo o como carajo manejarlo… no, prefiero aprender por la experiencia a coste de mi esfuerzo y voluntad... no me interesan las limosnas…. Eso es algo que me molesta de la concepción cristiana del hombre, es como si tuviera que estar toodo el tiempo dedicado al ruego y a la misericordia, esperando que dios se acuerde de nosotros, tenga piedad y nos salve…. O sea todo lo que yo haga es al pedo, si a dios le caigo bien, me salva, si soy medio fulero o no tuve una actitud sumisa…fuiste.

Y ahí digo, que carajo hace uno? Es como una salvación, o una trascendencia mejor dicho, en piloto automático… no. Me da paja,,, es no vivir eso… prefiero pecar, cabrearme, equivocarme y sufrir por voluntad propia a tener que vivir esperando una epifanía piadosa que me salve, sin siquiera merecerlo. Prefiero ganarme mi alma.

Digo pobre Salomón, se querría matar… todo lo que tengo no es mío, no lo merezco.. lo tengo porque me cayo de arriba… bah igual no leí esa parte de la Biblia porahi el flaco se lo merecía y todo eso… tendría que corroborarlo. Y seguramente mi interpretación del cristianismo es muuuy subjetiva y caprichosa… pero buen, es lo que me late.

No hay comentarios.: